¿En qué podemos ayudarte?
Configurar el Correo en IOS
Para configurar nuestro correo en IOS (IPhone o IPad) debemos pinchar en el icono «Ajustes»:
A continuación, tocamos en «Contraseñas y cuentas» (en versiones anteriores de IOS había que tocar en «Correo» y, en la siguiente pantalla en «Cuentas»):
Llegamos a una pantalla con un listado de todas nuestras cuentas y, al final, la opción de «Añadir cuenta»:
Pinchamos ahora en «Añadir cuenta de correo»:
En la siguiente pantalla elegiremos nuestro proveedor de correo y tan sólo tendremos que introducir nuestra dirección de correo y nuestra contraseña para dejar la cuenta configurada. En caso de que usemos un correo de Office 365, elegiremos «Exchange». Si no conocemos el proveedor, no es ninguno de los listados o no estamos seguros, pulsaremos en «Otra».
En muchos casos bastará con escribir nuestra dirección de correo y nuestra contraseña y nuestro dispositivo detectará la configuración automáticamente. El «Nombre» y «Descripción» son arbitrarios, pondremos los que mejor identifiquen la cuenta. Pulsamos en «Siguiente» y, si hemos tenido suerte, la cuenta ya estará configurada:
Pulsamos en «Guardar» y ya podemos acceder a ella a través de la aplicación de correo.
Si no se ha conseguido la configuración automática, llegaremos a la pantalla de configuración manual.
Configuración manual del correo en IOS
La primera decisión que deberemos tomar en la configuración manual es si nuestro correo va a ser POP o IMAP.
El correo POP es el más antiguo y surgió como respuesta a la lentitud de Internet en aquella época: los correos se descargan del servidor a nuestro disco duro para su lectura sea más rápida. Esto implica que se borran del servidor y, por tanto, ya no son accesibles desde otro dispositivo. Por ejemplo, si se descargan en un móvil, ya no podrán verse en el ordenador.
En el correo IMAP se descarga una copia de los mensajes, quedando otra en el servidor. Ambas permanecen sincronizadas, de forma que si se elimina un correo en el móvil, se elimina en el servidor y en todos los dispositivos que tengan configurada la cuenta. Lo mismo pasa si se marca como leído, si se mueve a otra carpeta dentro de la cuenta, etc.
Sea cual sea el tipo de correo que elijamos, debemos conocer el nombre del servidor de correo entrante y del servidor de correo saliente. Podemos obtener estos datos de nuestro proveedor de correo. En la siguiente captura vemos como, en la parte de arriba, podemos elegir entre POP o IMAP. Debajo aparecen el «Nombre», el «Correo» y la «Descripción». El siguiente apartado se refiere al servidor de correo entrante: el «Nombre de host» es el nombre del servidor, el «Nombre de usuario» suele ser nuestro correo (si no lo es, preguntar al proveedor) y la «Contraseña» es la de nuestro correo. Lo mismo se aplica al servidor de correo saliente: el «Nombre de host» puede ser igual o no al del correo entrante y el «Nombre de usuario» y «Contraseña» suelen ser los mismos.
Una vez rellenados los datos, pulsamos en siguiente:
Si todo ha ido correctamente, nos aparecerá la pantalla para guardar la cuenta y habremos terminado.
Configuración segura
En algunos casos, tras el paso anterior puede aparecernos un aviso con el título «Imposible verificar la identidad del servidor». Esto se debe a que no se han detectado correctamente los ajustes de seguridad. En este caso pulsaremos en «Continuar» (es posible que debamos hacerlo dos veces: una para el servidor de entrada y otra para el de salida) y guardaremos la cuenta igualmente. A continuación volveremos a acceder a la cuenta a través de «Ajustes», «Contraseñas y cuentas»:
Veremos dos nuevas opciones: «SMTP» y «Avanzado»:
Es el proveedor de correo el que nos tiene que dar la configuración a la que se accede en estas pantallas, aunque, generalmente, lo único que hay que hacer es activar el SSL y poner los puertos correspondientes. Los puertos estándar para el servidor de entrada son 995 (POP) y 993 (IMAP) y, para el servidor de salida son el 465 (SSL) o 587 (STARTTLS). Estas son configuraciones seguras. Desde Cordero y Asociados no aconsejamos ninguna configuración de correo que no incluya los protocolos SSL o STARTTLS.
Por tanto, pulsaremos primero en «SMTP», activaremos «SSL» y pondremos el puerto correspondiente:
Pulsamos «Ok». Si el puerto 465 no funciona, podemos probar el 587. Volvemos a la pantalla anterior y pulsamos en «Avanzado». Activamos «SSL» y ponemos el puerto 993 para IMAP o 995 para POP:
Pulsamos en «Cuenta» para salir de esta pantalla. Si no nos funcionan estos parámetros, tendremos que contactar con nuestro proveedor para que nos comunique los correctos.
Pues bien, ya podemos abrir la aplicación de Mail para consultar el correo de nuestra nueva cuenta.
Si su dispositivo es Android, puede acceder al tutorial de configuración de correo aquí.